Ni masculino ni femenino: el primer documento no binario de Latinoamérica

Gerónimo Carolina González Devesa es de Mendoza, Argentina. Tiene 32 años, es médique y acaba de sentar un precedente histórico no solo en su país, sino en toda Latinoamérica: en su documento su sexo no estará definido ni como masculino ni como femenino.

En su partida de nacimiento original, la del 16 de junio de 1986, su nombre figura como María Carolina González Devesa y su sexo como femenino. Ahora tiene una nueva, con fecha de 1 de noviembre de 2018. Dice Gerónimo Carolina González Devesa. Y nada más.

Todo empezó cuando quiso hacerse una mastectomía (operación quirúrgica mediante la cual se remueve la totalidad del tejido mamario), pero para autorizar la operación, la obra social le pidió que cambiara su género en el DNI. Mentira, todo empezó mucho antes.  

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En una entrevista con Clarín, Gerónimo Carolina cuenta que tenía aproximadamente cinco años cuando empezó a vestirse como un nene. En el secundario se dio cuenta de que las chicas le gustaban más que los chicos, y se declaró oficialmente lesbiana. Se recibió de médique, se casó con una chica. Pero algo seguía sin cerrarle: su cuerpo le incomodaba y por eso lo maltraba con atracones y vómitos. Necesitaba más cambios y por eso empezó a tomar testostorona. Pero las tetas no encajaban en su cuerpo.



Ante el pedido de la obra social de cambiar su género en el DNI para poder realizar la intervención quirúrgica, Gerónimo Carolina se encontró en una nueva encrucijada: no se sentía representade ni por lo femenino ni por lo masculino.

Entonces acudió a Eleonora Lamm, doctora en Derecho y Bioética y subdirectora de Derechos Humanos de la Corte mendocina. Le preguntó si era posible que en su documento no figurara ningún sexo. Apoyándose en la Ley de Identidad de Género 26.743, sancionada en la Argentina en 2012, Lamm dijo que sí, que era posible.

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"No quería elegir ser varón o ser mujer para encajar en una estructura. Me siento más varón, pero soy feminista. Y la figura del macho patriarcal no me gusta. La imagen de un varón a veces puede ser violenta. Tampoco me siento cómoda siendo mujer. A veces me pongo ropa de mujer, pero prefiero la ropa de varón. Me gusta el pelo corto. La verdad es que mi imagen es más la de un gay que la de un varón heterosexual", cuenta para Clarín.

La resolución que habilitó el primer documento no binario de Latinoamérica lleva la firma del Director del Registro Civil, Enzo Javier Rizzo y exige que se labre una nueva partida de nacimiento en la que el campo de sexo será completado con una línea. Ni femenino ni masculino.

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